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| La Infanta Cristina, feliz tras estafar 5,8 millones de euros y salir indemne |
Hola queridos lectores;
empecemos con el tema de hoy: La justicia, esa utopía que todos soñamos alcanzar pero a la que no logramos ni siquiera acercarnos.
Y es que, como todo el mundo sabe, la justicía está representada por una balanza y,... ¿Qué hay mas inconcreto, más imperfecto y más defectuoso que una balanza? Todas tienen error y sirven para el temido "Más o menos". Has hecho "tal cosa", así que "más o menos" lo que compensa tu fechoría es "esta otra cosa" (porque ni mil años de cárcel cubren el dolor de una familia a la que le han arrebatado a su hija, por ejemplo). Hasta aquí todos de acuerdo. Pero en la justicia española nos ha tocao el tendero avispao y nos ha trucado la balanza, para que su prima, pague menos. En la metáfora absurda que estoy utilizando... su prima es la monarquía.
El matrimonio, como lo entiendo yo... es un vínculo de confianza que une a dos personas. Un vínculo en el que las dos pasan a ser una en lo material, en lo sentimental y en los objetivos a cumplir (sin anularse ninguno de los dos). Por lo tanto, se espera de un matrimonio que cada uno sepa a qué se dedica el otro, los gustos, los que le caen mal en el trabajo, los que son sus amigos, qué ingresos se tienen, y un sin fin de tonterías más como por ejemplo a qué hora caga, qué alimentos le repiten y a qué le huelen los pedos, si me apuras. En lo que entiende una mujer, la parte escatológica estaría eliminada. Cierto es, a la par que innegable, que probablemente un matrimonio real (real de realeza) no sea igual... pero vamos, lo que está claro es que la Infanta sabe como le huelen los pedos a Urdangarín, si ronca o no y por supuesto sabe cuánto dinero trae a casa y en qué concepto llega. Más aún si también formaba parte del Instituto Noos. Cualquier mujer de cualquier imputado (implicada o no), habría sido imputada también porque en la convivencia se sobreentiende que todas estas cosas son sabidas por ambos miembros de la pareja. La respuesta a la pregunta ¿Por qué la Infanta no? es simple. Porque es hija de... (No, no quería decir hija de puta, sino del Rey de España, de nuestro amigable Juanca). Ver entrada "Un buen rey"
Pero no es el único caso en que un miembro de la familia real consigue escaquearse. Si yo hubiese cazado un elefante, ahora mismo estaría preparando mi defensa en un juicio en el que se me acusaría de traficante de marfil (por lo menos). Pero visto lo visto no necesitaría ni un abogado. Como todos somos iguales ante la ley... (Tono irónico) seguramente bastaría con un simple "Lo siento... me he equivoado, no volverá a pasar" y ya está. Y un huevooooo estaría jodido y bien jodido.
Nuestro tendero no se ha quedado contento con beneficiar a su prima, quiere que la balanza también falle a favor de su tia abuela del pueblo, lo que en mi ingeniosa metáfora (porque cada vez me mola más) sería: El enchufao. Es por eso, que un imputado en un delito de tráfico en el que se le atribuyen cargos como conducir borracho en contradirección y en una autopista, provocando la muerte de un joven, quede indultado. Casualmente, resulta que su abogado estaba en algún cargo dentro del ministerio de justicia. ¡Vaya por diós! pero qué casualidad. Confundieron el tipo de tráfico, creían que era "tráfico d influencias". Pobrecitos.
En mi opinión, estos hechos escandalosos (como apuntaría, sin lugar a dudas, Raphael), deberían ser revisados. Pero no sólo hacer el cambio y aquí no ha pasado nada. ¡Qué coño! estamos hablando de la muerte de una persona, de robos millonarios, de terrorismo animal... si yo la cago en mi trabajo, me chutan. Así que deberían, despedir, suspender o mandar al exilio a los jueces que permiten todo esto.
Hasta aquí mi indignación de hoy.
No, espera. Aun queda un poco más
Ladrones, hijos de puta, mentirosos y corruptos de mierda ahí os pudráis y os chuten del país.
Saludos, queridos y apreciados lectores!
